2. Tumbándote
Una cosa es que te haga fiestas cuando llegas a casa y otra es
cuando tienen la misión de taclearte como jugadores de americano. Esto es
especialmente cierto con los perros grandes que pueden brincarte o correr tan
fuerte cuando te ven que si se estampan contigo ambos acaban en el suelo.
3. Ladrando
Hay perros que cuando ven que sus dueños se acercan desde lo
lejos empiezan a ladrar y no hay poder humano que los calle. Te ladran para
avisarte que ya te olieron o ya te vieron y que están desesperados por tenerte
ya muy cerca.